viernes, 4 de noviembre de 2011

"Don"



Cuando vi por primera vez a la curandera Pachita, lo primero que me dijo después de examinarme en silencio fue: “Hijo querido del alma, acepta el don”. Al principio creí que al tratarme de hijo quería convencerme de que era mi madre, para provocar una transferencia. Pero luego comprendí que lo que me estaba diciendo era “Eres hijo de tu propia alma. Acéptala”. 
Es decir, acepta ser lo que eres y no lo que los otros te han obligado a ser. Vence al tabú: realiza lo que te está prohibido.

Toda sanación nos invita a salir de la isla del Yo para aceptar la unión con el Otro. Claro está que, en la soledad de nuestra celda, es necesario que demos los primeros pasos, es decir ayudarnos a nosotros mismos hasta donde podamos: este esfuerzo creará la grieta por donde comenzarán a penetrar otras voces.

Hijo/a querido/a del alma, acepta el don.

Alejandro Jodorowsky.


───────»♣ ☆  ☆ ♣«───────

El descuido de nuestra dimensión interior es la causa fundamental 
de desarmonía en nuestras sociedades.
Toda la gente habla de cambiar el mundo, pero no a sí misma. 
Ésa es la revolución que yo defiendo.

Dalái Lama.

───────»♣ ☆  ☆ ♣«───────


───────»♣ ☆  ☆ ♣«───────

"Con el intelecto tenemos que aprender a ser lo que somos.
 Con el corazón tenemos que aprender a amar sin discriminación.
 Con el sexo tenemos que aprender a crear 
y con el cuerpo a vivir tranquilamente".

Alejandro Jodorowsky.

───────»♣ ☆  ☆ ♣«───────



Tres Dones Para Regalar A Tu Futuro Bebé.

Una pareja que desea concebir un hijo, debería estar dispuesta a otorgarle tres preciados dones sagrados:

1.- Un nombre que no contenga un destino.

Nombrar a un hijo como cualquier miembro del árbol o persona con la que alguno de los padres haya tenido un vínculo especial, supone traspasarle a aquél, una identidad que no le pertenece.

2.-Apertura total para aceptar el sexo con el que nazca.

La expectativa del sexo equivocado le llega al feto como una orden que tarde o temprano tiende a cumplir, pudiendo crear conflictos de identidad sexual o inadaptación a su género.

3.- Un billete de libertad para ser quién es en todas las etapas de su crecimiento.

Las palabras de los padres son poderosas bendiciones o maldiciones para el destino de sus hijos. Éstos, aunque creamos lo contrario, tienden a obedecer. No compararlo con nadie, no etiquetarlo con descalificativos, no predecir negativamente como será de mayor, no programarle sus vocaciones; en suma, respetar lo que es desde la concepción y para siempre. Ser para ellos el aire, el agua y la tierra que necesitan para que la semilla que llevan dentro florezca, tal y como tiene que florecer.

Alejandro Jodorowsky.
Plano Creativo.
Imagen: Anna Geddes